Un lugar donde tradición y vino se encuentran

B o d e g a

En 1986, veintiocho familias de viticultores y elaboradores de Tomelloso, unidas por la pasión por la viña heredada de generación en generación, decidieron dar un paso histórico: unirse para crear una bodega común que pusiera en valor el fruto de su trabajo.

Con sus tradicionales cuevas como testigos, nació Vinícola de Tomelloso, con el objetivo de ofrecer al mundo vinos manchegos diferentes, donde tradición y modernidad caminaran de la mano.

nuestra historia

E l S u e ñ o d e 2 8 F a m i l i a s

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Reconocimientos

O r g u l l o e n c a d a l o g r o

1991

El Primer Emblema

Cinco años después, en 1991, vio la luz el primer vino embotellado de la bodega: Añil, un blanco elaborado con uvas Macabeo que revolucionó la manera de entender los vinos blancos manchegos. Poco después llegaron los tintos con Ábrego y Torre de Gazate, este último convertido en un referente reconocido dentro y fuera de nuestras fronteras.

1987

La Aventura del Espumoso

Vinícola de Tomelloso fue pionera en Castilla-La Mancha en la elaboración de espumosos. En 1987 nació Mantolan, un proyecto innovador que comenzó con Airén y luego incorporó Macabeo y Chardonnay, dando lugar a un espumoso que hoy sigue siendo símbolo de celebración y orgullo.

DESPUÉS

Entre Tradición y Vanguardia

Con los años, la bodega ha crecido sin perder su esencia. Apostamos por reestructurar el viñedo con variedades como Tempranillo, Cabernet Sauvignon o Merlot, uniendo tradición y tecnología para crear vinos auténticos, con alma manchega y proyección internacional.

NUESTRA BODEGA

U n V i ñ e d o e n e l C o r a z ó n d e L a M a n c h a

En plena llanura manchega, a 660 metros de altitud, nuestros viñedos se nutren de un clima continental extremo, con inviernos fríos y veranos intensos. La baja pluviometría y el suelo calizo confieren a nuestras uvas una calidad excepcional y una maduración óptima. Entre viejas cepas en vaso y nuevas espalderas, el viñedo de Vinícola de Tomelloso es el alma de nuestros vinos.

En plena llanura manchega, a 660 metros de altitud, nuestros viñedos se nutren de un clima continental extremo, con inviernos fríos y veranos intensos. La baja pluviometría y el suelo calizo confieren a nuestras uvas una calidad excepcional y una maduración óptima. Entre viejas cepas en vaso y nuevas espalderas, el viñedo de Vinícola de Tomelloso es el alma de nuestros vinos.

Un Patrimonio Singular

Nuestra historia está ligada a elementos únicos del paisaje manchego:

Las Cuevas, más de dos mil en Tomelloso, que durante siglos fueron el lugar de elaboración y guarda del vino, con sus tinajas centenarias.

Los Bombos, construcciones de piedra seca que sirvieron de refugio a los agricultores y que hoy son emblema de la cultura vinícola de nuestra tierra.

La Torre de Gazate, que da nombre a una de nuestras marcas más icónicas, símbolo de la tradición vitivinícola de la comarca desde tiempos medievales.

Hoy, los vinos de Vinícola de Tomelloso son reconocidos dentro y fuera de España por su calidad y autenticidad. Seguimos fieles a la visión de aquellas 28 familias que nos fundaron: elaborar vinos que hablen de nuestro paisaje, de nuestras raíces y de la pasión que late en el corazón de La Mancha.